Creación y operación de centros de datos de bajo impacto
Reducir el impacto medioambiental del centro de datos no solo beneficia al medioambiente; puede reducir los costos operativos, ayudar a atraer nuevos clientes y abordar de forma proactiva los requisitos normativos cada vez más estrictos. Su ruta dependerá de si está desarrollando una nueva instalación o si busca optimizar un centro de datos existente.
Creación de un centro de datos de bajo impacto
Las organizaciones en las primeras etapas del proceso de desarrollo del centro de datos tienen una ventaja en reducir las emisiones en comparación con las que optimizan las instalaciones existentes. En una nueva instalación, usted está tratando con una pizarra en blanco, sin carga por los sistemas heredados. Cada decisión se puede tomar con el objetivo de reducir el impacto y las instalaciones resultantes a menudo pueden lograr cierto nivel de eficiencia y utilización de recursos que no es posible con las instalaciones existentes. Estas son algunas de las decisiones que pueden afectar al impacto medioambiental de un nuevo centro de datos.
Donde las organizaciones tienen la flexibilidad de elegir, ubicar las instalaciones en climas más fríos permite un mayor uso del free-cooling para reducir el consumo energético de las instalaciones. Sin embargo, con la necesidad de acercar los recursos informáticos y de almacenamiento a los usuarios, los operadores no siempre pueden darse ese lujo y deben ser capaces de operar eficientemente en cualquier entorno, incluyendo climas más cálidos con recursos hídricos limitados. Independientemente de dónde se encuentre su centro de datos, el clima y la disponibilidad de agua deben tenerse en cuenta durante el diseño.
Establecer objetivos de eficiencia y uso del agua para una nueva instalación puede abrir nuevas opciones de financiación. Los “bonos verdes” son cada vez más populares y también están disponibles los préstamos relacionados con ESG, en los que los tipos de interés están vinculados al rendimiento medioambiental.
Varias organizaciones han establecido herramientas y certificaciones para ayudar a los desarrolladores a reducir el impacto de los edificios. Estos son tres a tener en cuenta:
- BREEAM es un método de evaluación utilizado para planificar proyectos, infraestructura y edificios. Le ayuda a los propietarios y operadores de centros de datos a equilibrar el valor de los costos y del ciclo de vida, reducir los costos operativos y reducir el riesgo.
- El Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental (LEED), (Leadership in Energy and Environmental Design, LEED), administrado por el U.S. Green Building Council, les otorga certificación a edificios con base en la eficiencia energética, la huella de carbono, la calidad del aire, los materiales de construcción, el uso del agua y otros factores.
- La norma ISO 21930:2017, Sostenibilidad en edificios y obras de ingeniería civil, les permite a los asesores determinar la sostenibilidad ecológica de los proyectos de construcción o infraestructura.
Los desarrolladores pueden aprovechar materiales innovadores y más respetuosos con el medioambiente en sus edificios. Un material prometedor es CarbonCure, que mineraliza químicamente el CO2 en el hormigón mientras que mejora la resistencia. Building Transparency es una organización que proporciona una calculadora de carbono incorporada en la construcción (EC3) para ayudar a modelar los impactos del carbono y el precio de las diferentes opciones de materiales utilizados en los proyectos de construcción de centros de datos.
La prefabricación puede agilizar el proceso de desarrollo de un nuevo centro de datos. Este método también puede impulsar un alto grado de eficiencia operativa a través del enfoque holístico del diseño, la ingeniería, la construcción y el arranque.
La huella de carbono de un centro de datos depende en gran medida de la fuente de energía utilizada. En la mayoría de las áreas, las empresas de servicios públicos tienen una capacidad limitada para apoyar la operación con energía 100 % renovable, lo cual obliga a los operadores comprometidos con el funcionamiento sin emisiones de carbono a recurrir a otros métodos. Los líderes de toda la industria están trabajando para avanzar en tecnologías que apoyarán la transición a la energía renovable generada localmente para obtener un mayor control sobre la energía utilizada por los centros de datos. La implementación de tecnologías como los sistemas UPS con capacidades dinámicas de soporte de red combinadas con baterías de iones de litio puede posicionar un nuevo centro de datos para integrar estas tecnologías a medida que estén disponibles.
Trabajar con proveedores que se han comprometido a reducir el impacto medioambiental de sus operaciones y soluciones puede ayudar a garantizar que todas las partes compartan objetivos comunes. Las certificaciones de productos relacionados con la eficiencia, como ENERGY STAR, también pueden ser útiles para elegir proveedores y soluciones adecuados.
Actualmente se utilizan varios tipos de sistemas de enfriamiento que varían en su eficiencia energética y de agua. Los sistemas de potencia pueden tener diferentes clasificaciones de eficiencia, capacidades de control y clasificaciones de sobrecarga. Trabajar con un socio de infraestructura con una amplia gama de soluciones y experiencia para permitir operaciones eficientes es el mejor enfoque para garantizar que los sistemas de infraestructura se adapten a sus objetivos.
Reducción del impacto medioambiental en los centros de datos existentes
Si acaba de empezar a abordar las ineficiencias de los centros de datos, podría haber algunas victorias fáciles que se pueden conseguir al pasar a la contención de pasillos, monitorear las temperaturas de los centros de datos o aumentar el uso del free-cooling. Si ya implementó esas soluciones y está buscando dar el siguiente paso en su aventura, o amplió sus objetivos para incorporar aspectos del centro de datos con cero emisiones netas, es posible que necesite buscar sistemas tecnológicos más nuevos que hayan surgido en los últimos añoss. Independientemente de dónde empiece, aquí tiene una hoja de ruta para avanzar..
Usted necesita formas de medir lo que intenta mejorar. Algunas métricas, como PUE y WUE, son relativamente fáciles de capturar y pueden ser valiosas para impulsar la reducción del consumo de energía y agua. Otras, como la medición de las emisiones de carbono, pueden ser más difíciles, pero necesarias a medida que los informes sobre las emisiones se vuelven más comunes.
Con niveles medios de PUE aun por encima de 1.5, hay oportunidades en muchos centros de datos para lograr mejoras. Las tecnologías existentes, especialmente las utilizadas en el enfriamiento del centro de datos, pueden ser una barrera para lograr mejoras significativas en la PUE. Los enfoques relativamente simples, como la contención de pasillos y los controles a nivel de sistema, pueden mejorar la eficiencia de estos sistemas, pero en algún momento, puede ser necesario pasar a sistemas que puedan funcionar de manera más eficiente y maximizar el free-cooling. Trabaje con su socio de infraestructura para evaluar el sistema existente e implementar los cambios recomendados en las operaciones. Si es hora de actualizar, su socio también puede ayudarle a elegir una solución de enfriamiento adecuada en función de sus objetivos, ubicación del centro de datos, tamaño y combinación tecnológica.
Se pueden implementar herramientas como las rPDU inteligentes para obtener información detallada del consumo energético en todo el centro de datos. Los sensores de temperatura integrados con el sistema de enfriamiento se pueden utilizar para mantener el equipo en condiciones de operación seguras sin sobreenfriamiento.
Una forma de reducir las emisiones es usando menos energía, y eso a menudo se puede lograr aumentando las tasas de utilización del equipo. La identificación y el desmantelamiento de los servidores varados, la consolidación de los servidores poco utilizados y el uso de las funciones de gestión de potencia del servidor tienen el potencial de aumentar la utilización de TI. El uso de tecnologías de infraestructura modular puede ayudar a garantizar que los sistemas se dimensionen según los requisitos actuales, a la vez que se conserva la flexibilidad para escalar la capacidad a medida que cambia la demanda. Las nuevas arquitecturas de sistemas de potencia redundantes también les permiten a los sistemas UPS alcanzar niveles de utilización más altos de lo que era posible en el pasado.
Los operadores pueden reducir sus emisiones por medio de aprovechar los acuerdos de compra de energía y los certificados de energía renovable. Algunos operadores también están trabajando con empresas de servicios públicos para fomentar más energía renovable y están haciendo planes para apoyar a los centros de datos con energía renovable generada localmente.
El consumo de agua no siempre se ha considerado un problema para los centros de datos, pero con la escasez de agua en algunas áreas, se ha convertido en uno actualmente. Los operadores vinculados a tecnologías de enfriamiento con un consumo intensivo de agua pueden necesitar reevaluar estos sistemas y realizar cambios que reduzcan su dependencia de grandes volúmenes de agua para enfriar sus instalaciones.
La eliminación inadecuada de residuos electrónicos puede provocar fugas de metales pesados en la tierra y contaminar las aguas subterráneas y los ríos. Los programas eficaces de gestión de residuos electrónicos pueden eliminar estos riesgos a través de la renovación, la reutilización y la reventa de equipos que aun tienen valor, y garantizar el reciclaje responsable de los equipos al final de su vida útil. Los valiosos minerales que pueden capturarse a través del reciclaje incluyen acero, aluminio, cobre y oro. Las organizaciones pueden trabajar con un especialista en residuos electrónicos para crear sistemas de circuito cerrado donde recuperen, reciclen y reprocesen el 100 % de los residuos electrónicos del centro de datos.
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